La realidad virtual vigilará las conmociones cerebrales de los futbolistas en el Mundial de Qatar

Una empresa australiana llamada NeuroFlex cuenta con un casco de realidad virtual que formará parte del protocolo establecido por la FIFA para vigilar los posibles casos de conmociones cerebrales de los futbolistas durante el Mundial de Qatar que comienza el día 20 de noviembre. Esta tecnología está a disposición de los servicios médicos para que estudien los casos de aquellos futbolistas que sufran algún traumatismo cerebral en el transcurso del juego.
Para estudiar cada caso, los jugadores afectados por alguna conmoción se tienen que colocar el casco de realidad virtual. A través de él, y en tiempo real, se analizan los movimientos de los ojos y de la cabeza, lo que genera una serie de datos en los que los médicos se pueden basar para decidir si un futbolista puede o no regresar al campo de juego.
Cabezazos
La FIFA ha establecido un protocolo más amplio según el cual, habrá un subcomité para el estudio de las conmociones cerebrales. Los médicos contarán además con una pantalla para revisar las situaciones en las que se pueda producir alguna lesión peligrosa. El objetivo fundamental del protocolo es estar pendiente de lo que, en español, se denomina cabezazo. Este lance del juego pasa desapercibido las más de las veces, pero no es recomendable que así sea. Tecnologías no faltan, como ya le hemos contado en DT.

Hasta la fecha, según fuentes de la empresa australiana citadas por el The Sidney Morning Herald, los responsables de la salud de los jugadores diagnosticaban problemas cerebrales basándose en estimaciones y pruebas no del todo solventes. «Lo que hace Neuroflex- apuntan fuentes de esta empresa al citado diario- es proporcionar datos objetivos al equipo médico para tomar una decisión informada»
Este sistema se ha usado ya en campeonatos de rugby y en la Copa Árabe organizada por la FIFA. Su utilización en el Mundial forma parte de un acuerdo con la Asociación Aspetar, un hospital de medicina deportiva que atiende los eventos deportivos en Qatar.
Episodios negativos
La incidencia del balón en la cabeza es motivo de preocupación. De hecho, se considera que la denominada encefalopatía traumática crónica, tiene como causa «los golpes subconmocionales repetitivos, como los que los jugadores de fútbol reciben regularmente mientras cabecean la pelota», apunta la información del medio australiano.
Existe un precedente histórico muy negativo. Resulta que cinco de los jugadores de la selección de Inglaterra, ganadora del Mundial celebrado en este país en 1966, fueron diagnosticados de demencia, lo que le provocó la muerte a cuatro de ellos.