Marcus Rashford lucha contra la pobreza infantil
Menos hablar y más actuar. Así podría resumirse el punto de partida que Marcus Rashford, delantero internacional inglés del Manchester United, estableció a la hora de echar una mano a las numerosas personas, y muy especialmente a los niños, cuya situación de precariedad se ha acentuado por el coronavirus. A raíz del cierre de los colegios, miles de ellos se han quedado sin poder acceder a las comidas escolares gratuitas; para muchos, es la única que tienen cada día.
Consciente de la gravedad de la situación, Rashford, de 22 años, decidió tomar cartas en el asunto. Así, aprovechando su popularidad como jugador de élite que es, hizo un llamamiento el pasado mes de marzo a través de sus perfiles en las redes sociales para que las compañías de alimentos distribuyesen sus excedentes a través de la organización benéfica FareShare.
Además, previa contribución a la causa con una importante donación personal para inaugurar la campaña, invitó a sus seguidores a hacer lo propio en la medida de las posibilidades de cada uno con el objetivo de recaudar 100.000 libras destinadas a suministrar alimentos a los niños.
El impacto de la iniciativa no se hizo esperar. Su difusión a través de las redes sociales y medios de comunicación permitió llegar no sólo a los aficionados al fútbol sino a la sociedad británica en general. Tal es así que ha conseguido recaudar más de 20 millones de libras en donaciones económicas y de alimentos, y llegar a la friolera de 1.280.000 niños, según el propio Rashford.
«Mientras celebramos esto, también quiero recalcar que queda mucho por hacer. Creedme cuando digo que seguiré luchando para que ningún niño en el Reino Unido tenga que preocuparse por si va a poder comer o no. Esto es Inglaterra en 2020 y las familias necesitan ayuda», explicó días atrás el delantero.
Con motivo del confinamiento, el gobierno británico puso en marcha un programa en virtud del cual las familias desfavorecidas recibían vales canjeables para comprar alimentos destinados a los niños. La medida tenía previsto permanecer en vigor hasta el inicio de las vacaciones escolares, pero el movimiento solidario liderado por el joven jugador del Manchester United ha provocado que se prolongue.

Marcus Rashford, celebrando un gol del Manchester United junto a sus aficionados. / MUFC
Clave en este giro de timón de las autoridades han sido la publicación de una carta escrita por el propio Rashford en el diario The Times, títulada ‘Acabar con la pobreza infantil es un trofeo más grande que cualquier otro en el fútbol’, y un texto dirigido a los miembros del Parlamento. Su difusión a través de las redes sociales hizo el resto.»Mi madre trabajaba todo el día, ganando el salario mínimo, para asegurarse de que siempre hubiese una comida en la mesa por las noches, pero eso no era suficiente. El sistema no estaba hecho para que familias como la mía tuvieran éxito, sin importar cuánto trabajase mi madre», escribe en la carta.«Esto no va de política, sino de seres humanos. Tenemos que mirarnos al espejo y pensar si hemos hecho todo lo que está en nuestras manos para ayudar a esos niños. Dejando las afiliaciones políticas a un lado, ¿no podemos estar de acuerdo todos en que ningún niño debe pasar hambre», añade Rashford.»Como hombre negro que viene de una familia pobre en Wythenshawe, Manchester, podría haber sido sólo otro número en las estadísticas. En lugar de eso, gracias a la generosidad de mi madre, de mis entrenadores, mi familia y mis vecinos, las únicas estadísticas con las que se me asocian son goles, partidos jugados y convocatorias con la selección. Sería una injusticia para mi familia y para mi comunidad si no usara mi voz y mi plataforma para luchar contra esto«, apunta.Tras el anuncio del Gobierno dando atendiendo la reivindicación liderada por el futbolista, Rashford escribía lo siguiente en su cuenta de Twitter: «Ni siquiera sé qué decir. Miren lo que podemos hacer estando unidos. Esto es Inglaterra en 2020».

FareShare, mostrando su agradecimiento.
Deporte, solidaridad y redes sociales unidos, en definitiva, para llegar no sólo a los aficionados al fútbol sino a toda la sociedad por una causa justa. A sus 22 años, Rashford se ha ganado el reconocimiento de todos fuera de los terrenos de juego. Su gran título es este y brilla con luz propia.