Si quieres marcar gol, entrena tu cerebro

Se trata de una tecnología desarrollada por la empresa israelita i-Brain Tech que, en un principio, iba destinada (allá el año 2017) a ayudar a las víctimas de lesiones cerebrales. Pero sus gestores, y entre ellos fundamentalmente el neurocientífico Konstantin Sonkin, vieron la posibilidad cierta de aplicar su tecnología a los deportistas. Y en eso están hasta ahora, avanzando con distintas rondas de financiación que les permiten perfeccionar su sistema. El objetivo de esta empresa es sencillo: que los atletas desarrollen mejor sus cerebros con el fin de mejorar su rendimiento.
La tecnología, resumidamente, consiste en un videojuego que plasma lo que piensa tu cerebro. La mecánica se basa en el hecho de que todas las actividades que realizamos como humanos pasan primero por el cerebro. El sistema, basado en inteligencia artificial, trabaja directamente con los centros de control cerebrales. Desde allí se emiten las órdenes que, gracias a un gorro con sensores, se ejecutan en el videojuego. La base del aprendizaje y la mejora de resultados se consiguen a través de la repetición. Es decir, cuantos más entrenes tu cerebro a marcar un gol desde el punto de penalti y lo veas plasmado en el monitor, más posibilidades tienes de conseguirlo en el mundo físico.
Jugar solo con la mente
Igual que se entrenan los músculos para desarrollar un deporte, el propósito de esta tecnología es entrenar la mente de manera específica. El cerebro humano, especialmente el de las personas más jóvenes, se puede reconfigurar. En la medida que se trabaja en una determinada vía, adquiere una serie de automatismos. Así, por ejemplo, si un jugador de baloncesto trabaja virtualmente el tiro de tres, su mente termina interiorizando las pautas que debe cumplir para lograr su objetivo.
Lo que hacen los deportistas que entrenan su mente con i-Brain Tech es situarse delante de un monitor. Se colocan un gorro con sensores, eligen en el monitor un determinado contexto de jugada (por ejemplo, tirar una falta directa desde fuera del área) y jugar como si fuera el vídeojuego FIFA, pero dando a las figuras las órdenes de lo que tienen que hacer con el cerebro. Nada más.
El punto clave es establecer el puente entre el trabajo frente al monitor y luego en el entrenamiento en el mundo físico. La idea es que la reconfiguración de tu cerebro provoca automatismos que, a posteriori, se plasman en el terreno de juego, según los promotores de este artilugio. En unas declaraciones de hace un par de años de Sonkin a World Soccer, el neurocientífico aseguraba: “Lo que estamos haciendo es permitir que los futbolistas mejoren drásticamente su rendimiento entrenando directamente su órgano más importante. La investigación sugiere que el 90% del éxito en los deportes modernos está determinado por la funcionalidad del cerebro».
Procesar mucha información
Entre las funciones de este sistema, además de la mejora mediante la repetición, destaca también una segunda tarea. La inteligencia artificial de la que se compone, almacena datos sobre los jugadores que valen para ser estudiados a posteriori. Con toda la información recopilada se puede reconocer las fortalezas y debilidades de los deportistas, lo que sirve de base para realizar entrenamientos de superación o mejora. Por ejemplo, se aclaran situaciones de por qué un jugador sobrelleva mal la presión ambiental o si físicamente está fatigado.
El doctor Sonkin opina que el punto diferencial de un jugador del mayor nivel posible, pensemos en Messi, no se encuentra en su capacidad física, sino en su capacidad de asimilar información. “El fútbol es un juego técnicamente difícil- apunta- que requiere mucho compromiso cerebral y el desarrollo de muchas funciones. Necesita estar en el nivel más alto cognitivamente y procesar mucha información en una fracción de segundo».
La empresa considera que, con el uso de aproximadamente una hora a la semana de su sistema, se logran mejoras sustanciales. En esta línea añaden: «Prevemos que pronto, los entrenadores que piensen en quién estará en la alineación tendrán en cuenta los conocimientos sobre la preparación mental y el rendimiento cerebral de los jugadores».
Nuestro punto de vista
En DT hemos visto ya muchos sistemas que ayudan a mejorar los rendimientos de los atletas en general. Bajo nuestro prisma, y esto podemos considerarlo un dato objetivo antes que una opinión, existen muchas más tecnologías que trabajan la parte física. La mental y la emocional están en escalafones inferiores y, en nuestra opinión, no debería ser así.
En más de una ocasión hemos publicado artículos que tienen que ver con la neurociencia, como este de hoy, y también con el control de las emociones dado que, en los últimos tiempos, se detectan muchos problemas mentales en los deportistas. El cerebro como se dice hasta la saciedad es un gran desconocido y, por esa razón, exige un mayor detenimiento en el trabajo de los científicos y en la inversión de administraciones y empresas. La adecuada armonía entre el cuerpo y la mente es fundamental en el deporte. La tecnología puede ayudar mucho en ese sentido.