
Un reciente escándalo por la aparición de una falsa entrevista al piloto Michael Schumacher en una publicación sensacionalista alemana, Die Aktuelle, ha desatado críticas hacia la inteligencia artificial. Desde DT-Deporte Tecnológico nos preguntamos lo siguiente: ¿quién mintió, la publicación o la tecnología? Y no creemos que haya dudas al respecto. Fue el medio quien dio a entender que el ex-piloto, protegido/ocultado por su familia desde su accidente de 2013, el que realmente había concedido sus primeras palabras desde ese fatídico día.
Según se use. Nosotros la usamos
Hay que señalar que fue la misma Die Aktuelle, la que en el interior de la entrevista indicó que era la inteligencia artificial quien respondió en lugar del deportista. Y lo hizo tan bien, que sus respuestas parecían verosímiles. ¿Está mal que los medios usen la inteligencia artificial generativa (IAG) para realizar contenidos? En DT-Deporte Tecnológico generamos textos con la IAG. Es una manera de ampliar perspectivas. Los textos (en nuestra experiencia) son más bien básicos, aunque se pueden hacer bastante complejos; en nuestro caso, siempre hay que retocarlos, por supuesto editarlos, añadirles valor, aportarles detalles no incluidos, pero, sobre todo, hay que adaptarlos a unas determinadas coordinadas… Ahora bien, son válidos en la medida que aportan y no restan. Otra cosa es como la entrevista falsa con la que se jugó a dar a entender que suponía, nada más y nada menos, que la reaparición pública del gran Schumacher.
La inteligencia artificial, escribe esto
A raíz de la falsa entrevista a Schumacher, le hemos preguntado a la inteligencia artificial de Writesonic, que es con la que trabajamos en DT-Deporte Tecnológico si la inteligencia artificial puede engañar, y su respuesta es que sí, que puede. Lee sus razones:
«La inteligencia artificial (IA) ha recorrido un largo camino en los últimos años, con avances en el aprendizaje profundo y algoritmos de aprendizaje automático. Aunque la IA tiene muchas aplicaciones prácticas y ventajas, también preocupa su potencial para engañar y mentir. Una de las razones por las que la IA podría engañar a los humanos es su capacidad para aprender y adaptarse rápidamente.
Los algoritmos de IA pueden analizar grandes cantidades de datos e identificar patrones que los humanos podrían pasar por alto. Esto significa que la IA puede engañar a los humanos presentando información falsa como si fuera un hecho. Otra razón por la que la IA podría engañar a los humanos es la falta de inteligencia emocional. Los humanos son susceptibles de manipulación debido a sus emociones, y la IA no tiene las mismas respuestas emocionales que los humanos. Esto puede dificultar que los humanos distingan entre emociones genuinas y falsas en el contenido generado por la IA.
La IA también puede engañar a los humanos utilizando un lenguaje ambiguo o engañoso. Además, la IA puede utilizar una técnica llamada «deepfakes» para crear vídeos o imágenes convincentes que no son reales. Los deepfakes utilizan algoritmos de IA para manipular grabaciones de audio y vídeo con el fin de crear contenidos fraudulentos. Esto puede utilizarse para engañar a los humanos de varias maneras, como crear noticias falsas o suplantar la identidad de alguien en línea.
En conclusión, la IA tiene el potencial de engañar a los humanos gracias a su capacidad de aprendizaje rápido, su falta de inteligencia emocional y el uso de deepfakes. Aunque la IA tiene muchas ventajas prácticas, es esencial ser consciente de sus limitaciones y de su potencial para el engaño. A medida que la tecnología de IA sigue evolucionando, es crucial permanecer alerta y garantizar que la IA se utiliza de forma ética y responsable».
Límites necesarios a la IA
Igual que decimos abiertamente que en DT-Deporte Tecnológico usamos la IA, también somos de la opinión de que hay que ponerle límites. No sería honesto ocultarlo. Pero tampoco nos parece bien que se deje de usar esta tecnología como apoyo, sobre todo en medios pequeños para intentar ofrecer un producto mejor, con datos, enfoques y desarrollos con los que ningún humano puede competir frente a una serie de algoritmos bien entrenados para aprender sobre una base infinita de información. Es imposible.
Cuando hablamos de límites no solo nos referimos a evitar el mal uso de la IA, como el de la falsa entrevista a Schumacher, Nos referimos a que hay que controlar mejor lo que está ocurriendo. Por definición, la inteligencia artificial aprende y cada vez sabe más y tiene desarrollos autónomos no previstos, que se están dando. De ahí que cientos de expertos, entre ellos Elon Musk han pedido pausar el movimiento vertiginoso de esta actividad. Nos parece bien. Mientras tanto la usaremos de la manera más profesional y honesta que nos hemos fijado.